Consejos para contratar cuidadores de personas dependientes

 In Servicio doméstico

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Recomendaciones para contratar a profesionales para el cuidado de personas dependientes

Las personas dependientes son aquellas que no cuentan con autonomía para realizar las actividades básicas diarias como alimentarse, bañarse o vestirse y por lo tanto, necesitan de la asistencia de terceros. Por lo general se trata de personas mayores o con condiciones físicas que los limitan.

La dependencia puede ser de dos tipos: parcial, cuando necesita un cierto grado de ayuda o total, cuando la ayuda es completa. En ambos casos, se plantea la posibilidad de contratar a una persona que se dedique al cuidado de personas dependientes.

¿Contratar el servicio de cuidado de personas dependientes a domicilio?

Cuando se considera la posibilidad de contratar a un profesional para el cuidado de una persona dependiente, lo primero que pensamos es que sea en el domicilio ya que en el hogar es donde la persona que requiere el cuidado se sentirá mucho más cómoda, y donde incluso, puede mantener un cierto grado de autonomía.

¿Qué aspectos debemos tener en cuenta al contratar a un profesional para el cuidado de personas dependientes?

En situaciones donde hay una persona con dependencia de por medio, se requiere de la intervención de un profesional cualificado y por lo tanto debe tener ciertas aptitudes. En primer lugar debe ser una persona que cuente con la formación requerida para saber cómo prestar ayuda al paciente ante cualquier situación.

Además de la formación y experiencia en el cuidado de personas con dependencia, el profesional o cuidador deber contar con ciertos rasgos que favorezcan mantener una buena relación con el paciente y con su entorno. Por lo tanto, estamos hablando de que el cuidador debe tener empatía, ser amable y respetuosa.

¿Qué hace el cuidador para mejorar la calidad de vida de la personas con dependencia? El principal objetivo de un profesional dedicado al cuidado de personas con dependencia es mejorar su calidad de vida y por lo tanto su labor diaria estará dirigida a ayudarle en su día a día.

Para ello, deberá conocer muy bien cuáles son las limitaciones del paciente, pero ayudándole a mantener su autonomía, sin limitarlo. Un buen profesional del cuidado de personas con dependencia puede ayudar a mejorar la calidad de la vida del paciente creando una relación que beneficie a ambas partes.

Recomendaciones para familias con personas con dependencia

Lo primero que debemos tener en cuenta es que tener a una persona con dependencia en el entorno familiar no es una situación fácil y que en ocasiones, es difícil de aceptar. Lo cierto es que mientras más rápido lo asumamos, más rápido podremos buscar soluciones que sean beneficiosas para todos.

En ocasiones es la misma persona con dependencia la que le cuesta asumir su situación y es por ello que no le gusta aceptar la ayuda de su entorno.

Lo importante es ser empáticos y comprender la situación de la persona con dependencia, sin llegar a sentirnos culpables. Primero debemos intentar que la persona acepte sus limitaciones para que luego pueda aceptar nuestra ayuda.

Para empezar la ayuda domiciliaria podemos contratar el servicio de forma eventual para que no sea vista como intrusismo por parte del paciente. De esta forma el profesional puede ir facilitándole información y construyendo una relación.

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